sábado, 23 de septiembre de 2006
"El Papa ha dicho cosas que son ciertas"
ESTRATEGIA "La reacción atemorizada del mundo occidental no hace otra cosa que fortalecer los islamistas fanáticos"
PELIGRO "Creo que estamos en los prolegómenos de una tercera guerra mundial"
[Entrevista a Moshe Sharon por Jana Beris en "AVUI" 19/09/2006]
E l profesor Moshe Sharon, experto en Islam en el departamento de historia del Próximo Oriente e Islam a la Universidad Hebrea de Jerusalén, considera que la tormenta en el mundo musulmán por las declaraciones del papa Benedicto XVI será grave. En realidad, no le sorprende nada lo que está pasando y como cree que la violencia se puede cobrar víctimas fácilmente pide que la entrevista se publique sin su foto.
Qué pensó cuando sintió las declaraciones del papa Benedicto XVI?
Me pareció que se introduce en problemas graves y que, de hecho, pone en problemas el mundo cristiano en general. No porque haya dicho cosas que no son ciertas, sino porque estamos en una época en la cual el Islam extremista, fanático, que controla hoy las masas, aprovecha cualquier ocasión por actuar de forma violenta contra el mundo cultural de Occidente. El Islam puede atacar los cristianos, el Islam puede atacar los judíos, pero cuando el mundo occidental reacciona o, incluso dice cosas totalmente ciertas, la reacción es violenta. Y así empiezan a matar gente. Lo que dijo el Papa será utilizado ahora como pretexto oficial por perpetrar asesinatos. La guerra santa, jihad, recordémoslo, no se ha parado y su objetivo siempre es el mundo cristiano. Por lo tanto, allá donde puedan atacar cristianos e instituciones cristianas intentarán hacerlo. Creo que estamos en los prolegómenos de una tercera guerra mundial, pero el mundo occidental todavía no es consciente. Yo creo que Europa está en el cariz de un derrumbamiento total a manos del Islam. La reacción atemorizada del mundo occidental no hace otra cosa que fortalecer los elementos fanáticos que conducen las multitudes islámicas. El futuro no parece nada prometedor.
¿Encuentra justo hablar del Islam en términos tan categóricos o haría falta hablar sólo del Islam extremista?
La pregunta es quien guía el mundo islámico. Y los que dirigen hoy el mundo islámico no son los filósofos o elementos intelectuales influidos por la cultura occidental, que quieren vivir en paz en Occidente, sino los que hacen sermones en las mezquitas y los maestros fanáticos de las escuelas religiosas, las concepciones islámicas que hablan de una guerra global entre el mundo islámico y el mundo occidental. Debemos recordar que el mundo islámico normal ve sus relaciones con el mundo de fuera, el no islámico, como relaciones determinadas por la espada. Lo máximo que puede pasar es que el Islam suspenda por un momento la guerra, porque no está preparado ni es lo suficiente fuerte por entregarla.
Entonces, ¿no tiene sentida hablar, porque siempre habrá guerra?
En gran medida, es verdad. La única manera con qué se podía tratar con el Islam en el pasado era empleando las mismas herramientas. Esto sirve porque los musulmanes no se han dado nunca golpes de cabeza contra la pared. Quiero decir que cuando vean que no conseguirán derrotar el enemigo, llegarán a un acuerdo con él. Por esto, cuando me preguntan cuál es el futuro de Israel en medio de este mundo musulmán, digo que si Israel es lo suficiente fuerte como para que los árabes y los musulmanes pierdan toda esperanza de destruirlo, hablarán con él. En aquel momento nada no tendrá valor, ni los territorios [palestinos], ni Jerusalén, nada de nada.
¿Usted no ve ningún elemento positivo en el Islam?
Es indudable, claro que hay principios bellos en el Islam. Hay, por ejemplo, el tema de la limosna a los más necesitados, el de ayuda a quienes no tienen dinero. En las leyes de guerra del Islam se prohíbe matar mujeres, ancianos y niños, aun cuando lamentablemente en la práctica no se cumple y se publican fatuas [edictos religiosos] que justifican que no se cumplan estas leyes. El mundo islámico ha producido una literatura bella, bella poesía, filosofía, matemáticas. Hay muchas cosas buenas que el Islam ha desarrollado y que sin lugar a dudas son importantes. Pero debemos recordar una cosa que es básica: no son estas las cosas que han determinado las relaciones entre el Islam y el mundo de fuera de esta religión. Aunque el Papa encuentre estas cosas, no son estos los elementos que han guiado la relación entre el Islam y el mundo cristiano. El mundo cristiano siempre ha visto en el Islam su peor enemigo.
Moshe Sharon es experto en Islam en el departamento de historia del Próximo Oriente e Islam a la Universidad Hebrea de Jerusalén.
PELIGRO "Creo que estamos en los prolegómenos de una tercera guerra mundial"
[Entrevista a Moshe Sharon por Jana Beris en "AVUI" 19/09/2006]
E l profesor Moshe Sharon, experto en Islam en el departamento de historia del Próximo Oriente e Islam a la Universidad Hebrea de Jerusalén, considera que la tormenta en el mundo musulmán por las declaraciones del papa Benedicto XVI será grave. En realidad, no le sorprende nada lo que está pasando y como cree que la violencia se puede cobrar víctimas fácilmente pide que la entrevista se publique sin su foto.
Qué pensó cuando sintió las declaraciones del papa Benedicto XVI?
Me pareció que se introduce en problemas graves y que, de hecho, pone en problemas el mundo cristiano en general. No porque haya dicho cosas que no son ciertas, sino porque estamos en una época en la cual el Islam extremista, fanático, que controla hoy las masas, aprovecha cualquier ocasión por actuar de forma violenta contra el mundo cultural de Occidente. El Islam puede atacar los cristianos, el Islam puede atacar los judíos, pero cuando el mundo occidental reacciona o, incluso dice cosas totalmente ciertas, la reacción es violenta. Y así empiezan a matar gente. Lo que dijo el Papa será utilizado ahora como pretexto oficial por perpetrar asesinatos. La guerra santa, jihad, recordémoslo, no se ha parado y su objetivo siempre es el mundo cristiano. Por lo tanto, allá donde puedan atacar cristianos e instituciones cristianas intentarán hacerlo. Creo que estamos en los prolegómenos de una tercera guerra mundial, pero el mundo occidental todavía no es consciente. Yo creo que Europa está en el cariz de un derrumbamiento total a manos del Islam. La reacción atemorizada del mundo occidental no hace otra cosa que fortalecer los elementos fanáticos que conducen las multitudes islámicas. El futuro no parece nada prometedor.
¿Encuentra justo hablar del Islam en términos tan categóricos o haría falta hablar sólo del Islam extremista?
La pregunta es quien guía el mundo islámico. Y los que dirigen hoy el mundo islámico no son los filósofos o elementos intelectuales influidos por la cultura occidental, que quieren vivir en paz en Occidente, sino los que hacen sermones en las mezquitas y los maestros fanáticos de las escuelas religiosas, las concepciones islámicas que hablan de una guerra global entre el mundo islámico y el mundo occidental. Debemos recordar que el mundo islámico normal ve sus relaciones con el mundo de fuera, el no islámico, como relaciones determinadas por la espada. Lo máximo que puede pasar es que el Islam suspenda por un momento la guerra, porque no está preparado ni es lo suficiente fuerte por entregarla.
Entonces, ¿no tiene sentida hablar, porque siempre habrá guerra?
En gran medida, es verdad. La única manera con qué se podía tratar con el Islam en el pasado era empleando las mismas herramientas. Esto sirve porque los musulmanes no se han dado nunca golpes de cabeza contra la pared. Quiero decir que cuando vean que no conseguirán derrotar el enemigo, llegarán a un acuerdo con él. Por esto, cuando me preguntan cuál es el futuro de Israel en medio de este mundo musulmán, digo que si Israel es lo suficiente fuerte como para que los árabes y los musulmanes pierdan toda esperanza de destruirlo, hablarán con él. En aquel momento nada no tendrá valor, ni los territorios [palestinos], ni Jerusalén, nada de nada.
¿Usted no ve ningún elemento positivo en el Islam?
Es indudable, claro que hay principios bellos en el Islam. Hay, por ejemplo, el tema de la limosna a los más necesitados, el de ayuda a quienes no tienen dinero. En las leyes de guerra del Islam se prohíbe matar mujeres, ancianos y niños, aun cuando lamentablemente en la práctica no se cumple y se publican fatuas [edictos religiosos] que justifican que no se cumplan estas leyes. El mundo islámico ha producido una literatura bella, bella poesía, filosofía, matemáticas. Hay muchas cosas buenas que el Islam ha desarrollado y que sin lugar a dudas son importantes. Pero debemos recordar una cosa que es básica: no son estas las cosas que han determinado las relaciones entre el Islam y el mundo de fuera de esta religión. Aunque el Papa encuentre estas cosas, no son estos los elementos que han guiado la relación entre el Islam y el mundo cristiano. El mundo cristiano siempre ha visto en el Islam su peor enemigo.
Moshe Sharon es experto en Islam en el departamento de historia del Próximo Oriente e Islam a la Universidad Hebrea de Jerusalén.
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