¿De qué va esto?

Esto es un blog pro-Israeli.

Lo creamos hace ya casi cinco años, en los albores de la operación Litani, tras el secuestro de Ehud y Eldad. Cuando Gilad llevaba más de un mes en manos de Hamas.

Han pasado casi cinco años. Gilad sigue en manos de Hamas, Ehud y Eldad volvieron a Israel. Muertos. Muchas cosas han pasado, pero poco ha cambiado. Una tregua, Sderot bajo el fuego de los qassam, atentados, una operación contra Hamas, la reconciliación entre Fatah y Hamas, informes sesgados, la ONU, secuestros en Gaza, flotillas pseudo-pacifistas…

Lo que nos hizo abrir este blog en ese momento, fue notar que no recibíamos información sobre lo que pasaba en Israel. Empezamos a traducir noticias, a escribir crónicas basándonos en la información que recogíamos de fuentes de todo el mundo.

Después la calma, después otras luchas en otros lugares. Nos volvimos más críticos, más pesimistas.

Pero seguimos aquí, y pensamos, que pese a quien pese, Israel seguirá existiendo. Y seguiremos peleando, para que eso sea así.

domingo, 6 de junio de 2010

Hablando de deja vu

Cualquiera que haya osado en la última semana defender a Israel tras lo sucedido en el Mavi Marmara, estoy seguro de que tendrá unos cuantos deja vu al leer el artículo que robé (algo bastante habitual en mi, cuando veo un artículo que me gusta y que expresa ideas interesantes y puntos de vista en los que no había pensado) de Safed-Tzfat.

Me he pasado, la última semana, inmerso en una batalla dialéctica, en varios foros, contra los que creen que el linchamiento de soldados entra dentro del “Manual básico del buen pacifista”.


Siete tópicos contra Israel - Salvador Sostres - Artà - Mallorca
1. No ha sido una respuesta proporcional.
Este es el primer reproche siempre, pase lo que pase. Ninguna respuesta del Estadlo de Israel, desde su fundación, ha sido considerada proporcional. Este apasionante concepto: la proporcionalidad, como si se tratara de un partido de cricket, como si se tratara de empatar. Y luego, por supuesto, la pedantería europea de darle lecciones a todo el mundo.
2. Los palestinos sólo tienen piedras.
Para reforzar aún más la idea de desproporcionalidad, se insiste en la falsedad de la falta de recursos bélicos de los palestinos, como si en el fondo se deseara que tuvieran más munición para poder matar mejor. No es cierto que los palestinos sólo tengan piedras: sus vecinos árabes se encargan de armarlos convenientemente y de ahí que Israel se haya visto obligado a imponer el bloqueo. Como dijo Golda Meir, «podría entender que los árabes quieran borrarnos del mapa. Pero, ¿es que realmente pretenden que cooperemos con ellos en eso?»
3. Mira que siempre apoyo a Israel, pero esta vez ya no puedo más.
Lo gracioso de esta frase es que la gente que la dice, la dice cada vez.
4. Israel tiene derecho a existir dentro de unas fronteras seguras pero no a cualquier precio.
¿Y cómo conseguir una existencia pacífica cuando sus enemigos pagan cualquier precio para destruirlas? ¿Cómo conseguir esta existencia pacífica con terroristas que sienten más odio por Israel que aprecio por sus vidas? En una situación de permanente amenaza como la que vive Israel, de permanente amenaza de exterminio, ¿qué significa «no a cualquier precio»? ¿A partir de qué precio tiene Israel que sucumbir y dejarse eliminar?
5. Israel ve terroristas de Al-Qaeda en todas partes.
Después del 11-S, de los autobuses de Londres y de los trenes de Atocha, sorprende este nihilismo occidental de hablar del terrorismo islamista en tercera persona. Sí: en todas partes acecha la amenaza islamista, de un modo incluso más angustioso y sangriento que la amenaza comunista. Y con la única misión de destruir el mundo libre.
6. Israel está perdiendo todo su prestigio internacional.
Éste es uno de mis tópicos preferidos, he de reconocerlo. Israel sólo tuvo prestigio internacional en el Holocausto. Sólo entonces -sospechosamente- el mundo se apiadó de los judíos. Pero aparte de aquel momento tan brillante, ¿qué otro pueblo del mundo puede presumir, históricamente, de no haber sido nunca antisemita y de no haber perseguido jamás a los judíos? ¿Cuántos de estos pueblos se han disculpado por ello? ¿Y cuántos podrían asegurar que han borrado de raíz el antisemitismo de sus gobiernos y de sus corazones?
7. Parece mentira que un Ejército tan preciso y profesional como el de Israel haya necesitado matar a nueve personas.

Lo de las nueve personas se ha dicho en el caso concreto de la flotilla, pero el tópico es eterno y para cada ocasión se pone la cifra de bajas correspondiente. Es verdad que Israel tiene el mejor Ejército del mundo, pero también lo es que en una confrontación bélica nunca puedes saber lo que va a pasar y lo que vas a encontrarte. Y, sobre todo, hay que considerar que Israel no suele enfrentarse a un enemigo convencional sino a un tipo de terrorismo que usa escuelas y hospitales como bases militares, al que no le importa usar a la población civil de escudos humanos, y que mezcla armas con ayuda humanitaria y terroristas con cooperantes. Las guerras ya no son como antes. Pero algo en el fondo permanece inmutable. También lo dijo Golda Meir: «He dado expresas instrucciones, de ser avisada personalmente cada vez que caiga un soldado nuestro, así sea en medio de la noche. Cuando el presidente Nasser dé instrucciones de ser despertado en mitad de la noche cuando caiga un soldado egipcio, llegará la paz».

miércoles, 2 de junio de 2010

martes, 1 de junio de 2010

Pacifismo made in Spain

¿Alguien, no ha visto los videos que el ejército israelí ha subido a youtube, para explicar lo sucedido en el barco de bandera turca, de la flotilla de la Libertad? Son esclarecedores; tan esclarecedores, como los comentarios que los periodistas españoles vierten tras verlo.

En mi pequeño fanatismo (algo, de lo que se me ha acusado repetidas veces en las últimas horas, por negarme a creer a pies juntillas, que los malvados soldados israelíes entraron a matar a indefensos pacifistas dormidos) no acabo de encontrarle pacifismo, al uso de barras de hierro contra una persona tendida en el suelo. Por unas imágenes similares, protagonizadas por un hombre afroamericano llamado Rodney, se montaron los disturbios raciales más violentos del siglo pasado.

Uno se pregunta como el apaleamiento de un hombre (sí, los soldados israelíes son hombres por mucho que a algunos les cueste darse cuenta) con barras de hierro, se puede considerar “pacifismo”. ¿Alguien se ha leído una cita en la que Gandhi abogara por el uso de la barra de hierro como símbolo de la no-violencia y se ha olvidado de pasármela? ¿El Diccionario de la RAE ha cambiado el significado de pacífico y pacifismo?

Por cierto, hablando de la definición de pacifismo, resulta que la RAE define pacifismo como un movimiento que busca la paz entre los países, así que, ¿puede explicarme alguien como un grupo posicionado completamente a favor de una parte de un conflicto y en contra del otro, puede pretender: “la paz entre ambas”?

Por si alguien no lo sabe, la flotilla de la libertad no consideraba tener un hueco dentro de su militante pacifismo para entregar al soldado israelí que lleva CUATRO AÑOS SECUESTRADO POR HAMAS, una carta de sus padres que no saben nada de él desde hace meses.

Tampoco tiene hueco para condenar a la Hamas que hace una semana daba un ultimátum “a esos que ya saben lo que son” para entregarse o recibir el castigo merecido. ¿Desde cuando está el pacifismo a favor de la pena de muerte o de la persecución de los opositores?

Bueno, siempre les queda el recurso de llamar a los opositores al régimen de Hamas en Gaza, colaboradores de Israel, y así… lo siento, pero ni así consigo creerme que el pacifismo, por muy retorcido que se vuelva, pueda defender la ejecución y tortura de disidentes políticos.

Para los que creen que el ejército israelí entró en un barco y disparó contra pacifistas dormidos, nada mejor que ver el video del IDF que muestra como los pacifistas –despiertos, por si cabía alguna duda–, apalean a varios soldados usando barras de hierro.

Indiscutiblemente, hay más. La flotilla constaba de seis barcos, no hubo incidentes violentos en ninguno de los otros barcos, –parece, que los pasajeros de las otras embarcaciones, tenían un concepto bastante más “normal” de lo que es pacifismo; y consideraron que el uso de barras de hierro, cuchillos y armas de fuego no se podía considerar pacífico–.

Por si alguien duda, de la intención de los pasajeros del barco asaltado, sólo debe recordar –hay pruebas de eso, fue radiado por la radio del ejército israelí–, fueron avisados DOS HORAS ANTES, de que no iba a permitirse que pasaran a aguas territoriales israelíes, y que iban a ser detenidos.


Visto que ser pacifista significa acuchillar por la espalda, apalear con barras de hierro, no sé si declararme pacifista y explicar mi “doctrina” con una navaja en la otra mano. Pero siendo sinceros, nunca me han gustado las modas, y menos aún… el falso pacifismo. Así que… por hoy, se libran.